El pasado 15 de Marzo de 2019 el Gobierno aprobaba una ayuda de 150 millones de euros adicionales para el PEBA, el Programa de Extensión de la Banda Ancha de nueva generación. La fibra óptica sigue sin estar plenamente presente en zonas rurales, por lo que el interés recae en seguir llevándola a los pueblos.
Con esta cuantía, se pretende seguir extendiendo la conectividad de alta velocidad en las zonas rurales del país.
150 millones de euros como oxígeno para las zonas rurales
El ejecutivo ha puesto en marcha una nueva convocatoria de ayudas para el Plan de Extensión de la Banda Ancha (PEBA). Con esta se pretende acelerar el proceso de extensión de redes de banda ancha de muy alta velocidad en zonas rurales. Hasta el momento, se han concedido ayudas por un importe de 479 millones de euros y movilizado proyectos por valor de 871 euros, lo que ha permitido llevar internet de alta velocidad a más de 5 millones de hogares, según María Jesús Montero, Ministra de Hacienda y portavoz del Gobierno.
El objetivo principal es que el 89% de la población pueda tener fibra óptica. El programa nació en el año 2013 y sigue recibiendo ayudas, elevando la cifra a la citada cuantía de 479 millones de euros en total.
Los nuevos objetivos de 2019 a 2021 del plan PEBA se centran en el objetivo de velocidad pasa de 100 Mbps a 300 Mbps, el nuevo modelo de licitación por provincias, y la incorporación de las denominadas zonas grises NGA como zonas elegibles para recibir ayudas. Esto supone una mayor apuesta respecto al plan inicial, que tenía los 100MBps como objetivo para la velocidad de la fibra
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